Antonio era un niño de 8 años, aunque pronto cumpliría 9 🔵. Quería muchísimo a sus padres y le encantaba pasar tiempo con ellos 🔴🔵.
Iba a un Colegio en el que había muchísimos niños y niñas con los que le encantaba jugar 🔵 🔴. En el Colegio pasaban cosas buenas y en algunas ocasiones, otras cosas no tan buenas 🔴.
Antonio era un buen estudiante: responsable, inteligente, con ganas de trabajar, cumplidor con sus deberes 🔴… Sus padres y profesores estaban muy, muy contentos con él. 🔴 🔵
Una de esas cosas no tan buenas que sucedían en el Colegio era que Antonio, en ocasiones, tenía pequeños conflictos con otros compañeros. 🔵 🔴 Tanto era así que muchas veces no quería ir al Colegio porque le preocupaba tener problemas con algunos compañeros de clase y del Colegio. 🔴.
Antonio hablaba de esta situación con sus padres y con sus profesores 🔴, pero nunca sacaba algo en claro, ya que él no encontraba dónde podría estar el problema.
A Antonio estas situaciones le ponían triste, sobretodo porque no sabía qué tenía que hacer para lograr que no hubiera conflictos, o que pudiera pasar el día sin tener problemas. 🔴 🔵.
¿Qué podría hacer Antonio? Él sólo quería llevarse bien con sus amigos y jugar con ellos… 🔴
Antonio tenía problemas en el Colegio. Tanto es así que un día, se fue a una esquina del patio a llorar 🔴 🔵. Estaba muy triste. Pensaba: «ojalá alguien pudiera contarme qué hacer para no tener problemas con mis compañeros». Parece ser que necesitaba tener muy claro qué pasos seguir para no tener problemas. 🔵 🔴.
Esa tarde en casa le pidió a sus padres consejo, y ellos, como siempre hacían, estuvieron escuchándole y ayudándole 🔴 🔵 pero a Antonio no le servía. Parecía que le estuvieran dando soluciones para los problemas que tienen las personas mayores y no para los de los niños. «Es que a veces me pongo a jugar con ellos y de pronto nos estamos pelando», le decía a sus padres. 🔴
La tarde pasó rápido y llegó la noche. Antonio se fue a la cama. Le costó mucho quedarse dormido porque estaba pensando en qué iba a pasar al día siguiente en el Colegio 🔴. Pero esa noche pasó algo especial. 🔵
Antonio tuvo un sueño muy, muy especial….
A la mañana siguiente se despertó realmente contento, pero pensaba «como le cuente esto a alguien, no me van a creer». Decidió no contarle a nadie su sueño. Mientras desayunaba les explicó a sus padres el plan que tenía para solucionar los probemas con los demás.
¿LES MOLESTA?
Quizá para mí es una broma pero para los demás es molesto. Pensaré en ello antes de hacer cualquier cosa.
¿LO QUIERO HACER?
No haré cosas que no sean las que quiero hacer para caerle bien a los demás.
¿QUÉ QUIERO CONSEGUIR?
Pensaré siempre antes de actuar si lo que voy a hacer otras veces me ha servido para caer bien a los demás.
«¡Y siempre que tenga algún problema os lo contaré a vosotros, papá y mamá, y también lo diré en el Colegio! Estoy seguro que con estas cuatro cosas todo saldrá muchísimo mejor.»
Desde entonces, Antonio ha dejado de tener problemas. Ha dejado de hacer algunas cosas que ha descubierto que molestaban a los demás 🔴 y claro, si les molestaba, ellos no querían jugar con él. Además, sólo hace aquello de lo que está convencido y aquello que realmente quiere hacer 🔴, con lo que se siente más seguro y está más contento y tranquilo. Ha dejado de hacer aquellas cosas que solían terminar en conflicto o que acababan con una situación que no era nada buena 🔴.
Antonio, a día de hoy, es un niño realmente feliz.